Un canino fuera de lo habitual, mi nombre es Lobo y la tarea que tengo es más familiar que amigable, me encargo de ser la persona que dirige a mis iguales, ser el líder conlleva
mucha responsabilidad pues se me designa cuidar desde el más fuerte al más débil, una
comunidad que nos cuidamos entre sí, una vez mientras andábamos por las montañas vi a un hombre llegar, cargando entre sus brazos a una mujer y postrándola en el suelo, la besó y grito al cielo ¡Nunca dejaré de amarte! ¡Nunca….!, tiempo después en el lugar en donde habían acontecido los hechos vi que poco a poco fueron creciendo unos montículos de tierra, día tras día crecían más y más hasta que en el lugar se visualizó una gran montaña y un incandescente volcán, dándole así el seguimiento a la historia de Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
mucha responsabilidad pues se me designa cuidar desde el más fuerte al más débil, una
comunidad que nos cuidamos entre sí, una vez mientras andábamos por las montañas vi a un hombre llegar, cargando entre sus brazos a una mujer y postrándola en el suelo, la besó y grito al cielo ¡Nunca dejaré de amarte! ¡Nunca….!, tiempo después en el lugar en donde habían acontecido los hechos vi que poco a poco fueron creciendo unos montículos de tierra, día tras día crecían más y más hasta que en el lugar se visualizó una gran montaña y un incandescente volcán, dándole así el seguimiento a la historia de Popocatépetl e Iztaccíhuatl.